Empiezas a buscar un embarazo o acabas de ser madre y no quieres volver a embarazarte y oyes multitud de cosas ¿qué es verdad y qué no?
Desde que las mujeres se desarrollan comienzan a escuchar afirmaciones categóricas sobre sus funciones naturales y su sexualidad, muchas son verdad y otras flagrantes mentiras como que con la regla no se puede hacer deporte. Estos mitos y realidades no decrecen con el tiempo, si no que se continúan durante la edad adulta e, incluso, se acrecientan cuando se habla de buscar un embarazo o, por el contrario, cuando una no se quiere quedar embarazada.
Todas las mujeres hemos escuchado que durante la lactancia es imposible quedarse embarazada pero, también casi todas, conocemos algún caso en que los hermanos se llevan 13 meses y la mamá estaba dando el pecho. Confundimos conceptos como esterilidad e infertilidad y seguimos confiando en viejos mitos como que durante la regla no nos podemos quedar embarazadas. Estas falsas creencias provocan errores en cálculos de embarazos o frustran mucho en caso de estar buscando un embarazo.
Tratamos de aclarar los principales mitos relacionados con la concepción, para ello contactamos con la doctora Naira González López, ginecóloga de la Unidad de Reproducción Humana asistida del Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima en Vigo y con la doctora Santillán, ginecóloga experta en fertilidad de Ava, la primera pulsera capaz de detectar los días más fértiles de la mujer.
- El orgasmo femenino facilita el embarazo.
Para las doctoras este es un punto controvertido.
Para la doctora González el orgasmo es un fenómeno psicofisiológico complejo y, en cierta medida, desconocido en la especie humana. Comenta que, a nivel puramente fisiológico, el orgasmo femenino es un reflejo que se caracteriza por contracciones musculares rítmicas del tercio inferior de la vagina y, como ella afirma, existe la teoría de que estos movimientos de contractilidad pueden contribuir en el ascenso de los espermatozoides a través del aparato reproductor hasta la trompa donde se produce la fecundación del ovocito, sin embargo cree que es una teoría sin suficiente evidencia científica que lo respalde.
Por otro lado, para la doctora Santillán sí que es real que las contracciones uterinas favorezcan el transporte de los espermatozoides hasta el óvulo, además afirma que, aunque no esté probado que determinadas posturas aumenten la fertilidad, sí que se puede consultar sobre posiciones que facilitan el orgasmo femenino y recomienda que se practique con la pareja aquellas en las que ella alcance el clímax con mayor facilidad.
- Es imposible quedarse embarazada con la regla.
Aquí ambas doctoras aseguran que esta afirmación debe cogerse con pinzas y que, por tanto, se trata más de un mito que de una realidad. Para la doctora Santillán es importante que la mujer tenga en cuenta su propio ciclo menstrual. Afirma que “En aquellas con ciclos normales, es decir, de entre 26 y 31 días, es improbable que se produzca un embarazo. Las que tienen ciclos más cortos, de menos de 26 días, sí aumenta la posibilidad de embarazo.”
Cuando le preguntamos a la doctora González debemos evitar, siempre en contextos médicos, evitar el término imposible porque siempre hay excepciones a la norma. Como nos cuenta esta doctora, la regla es el sangrado que se produce por la descamación del endometrio, el tejido glandular que recubre el útero, entre 11 y 15 días tras la ovulación si no se ha producido la implantación del ovocito fecundado. La menstruación establece el inicio de un nuevo ciclo en el que, ovario y endometrio, se preparan para el momento fértil: la ovulación. Y que ocurre unos 12-14 días después de la menstruación, por tanto, “la menstruación no coincide con los días fértiles.” Sin embargo, asegura “En ocasiones pueden existir sangrados durante la ovulación que algunas mujeres confunden con la menstruación. Por eso no debe extenderse la idea de que con la menstruación es imposible quedarse embarazada. “
- No es posible quedarte embarazada si das el pecho
Ambas doctoras coinciden al afirmar que esto no es realmente cierto. Si bien durante la lactancia crece el nivel de prolactina, hormona que inhibe la ovulación, y las posibilidades de concepción disminuyen no es imposible que esto ocurra. Para la doctora González, la lactancia materna como método anticonceptivo solo es eficaz si, y solo si, se cumplen tres circunstancias:
• El niño debe alimentarse exclusivamente de leche materna.
• Durante el periodo que comprende los 6 meses posteriores al parto.
• La mujer debe permanecer en amenorrea, es decir, sin recuperar los ciclos menstruales.
Además asegura que “Hay que recordar que la eficacia de los métodos anticonceptivos naturales es menor que la de los de barrera u hormonales.”
- El embarazo no es posible durante la cuarentena.
La cuarentena o puerperio es el periodo que comprende desde el parto hasta la completa regresión de los cambios genitales y sistémicos que la mujer vive en el embarazo, tales como la regeneración del endometrio y la recuperación de la función ovárica por eso, la doctora González afirma que estos hechos “dificultan en gran medida que se pueda producir el embarazo en este período. Además, se suele recomendar evitar las relaciones sexuales mientras no se produce la completa recuperación del aparato genital femenino, ya que se puede incrementar la posibilidad de infección a este nivel.”
Para la doctora Santillán es importante, en este punto, recordar que, además, “los expertos recomendamos dejar un margen de dos años y nueve meses entre partos, de modo que el cuerpo tenga tiempo para recuperarse completamente.”
- Esterilidad e infertilidad es lo mismo
No, esterilidad e infertilidad no es lo mismo. La doctora Santillán nos explica que esta confusión se produce por analogía con el inglés donde ambos términos actúan como sinónimos. Sin embargo, tal y como nos cuenta la doctora González “hablamos de esterilidad cuando no se produce embarazo tras un período de tiempo de relaciones sin empleo de métodos anticonceptivos; y de infertilidad cuando habiendo embarazo este no llega a término, es decir se produce el aborto.”
- El legrado reduce las posibilidades de un nuevo embarazo.
Un legrado es una intervención quirúrgica en la que se dilata el cuello del útero y se raspa suavemente el endometrio sin dañar la capa basal. En ginecología hablan de legrado obstétrico “cuando el objetivo del procedimiento es evacuar los restos abortivos que permanecen en el interior del útero; pero el legrado puede emplearse en otras circunstancias, para solventar algún problema endometrial fuera del embarazo.” como nos cuenta la Dra. González.
Ambas especialistas coinciden al afirmar que el legrado no dificulta un nuevo embarazo siempre que no se hayan ocasionado cicatrices o adherencias intrauterinas a causa de esta intervención. Además, la Dra. Santillana afirma “. Incluso el efecto inflamatorio del legrado puede ser positivo. Por eso, algunos trabajos sugieren que hacer un microlegrado antes de un tratamiento de fertilidad incrementa las probabilidades de éxito.”